El nuevo barco de Royal Caribbean, el Odyssey of the Seas, fue bautizado el 14 de noviembre de 2021, en una ceremonia en Port Everglades, el puerto de cruceros de Ft. Lauderdale, Florida. De madrina, el barco tuvo a Erin Brown, una inspiradora mujer de Bahamas, que habiendo superado un cáncer, y luego de perder una pierna por esta razón, se convirtió en una triatleta, de categoría mundial y la única de Bahamas que participó de las eliminatorias de los Juegos Paraolímpicos.
Para una entrada triunfal a la ceremonia, Brown desfiló del brazo de Richard Fain, Chairman y CEO de Royal Caribbean Group. Fue un momento también emotivo para Fain, un líder de la industria, responsable de haber sido el transformador de los cruceros de Royal Caribbean, y de trazar pautas a seguir por otras líneas de barco. El anunció en la semana previa su dimisión a esa posición a partir de enero de 2022, aunque seguirán siendo parte de la Junta de Directores. “Señoras y Señores, estamos de vuelta”, dijo Fain como parte de su discurso.
A ellos se les unieron Michael Bayley, presidente y CEO de Royal Caribbean, Nick Weir, vicepresidente Senior de Entretenimiento, además del capitán del barco. Bayley dijo que era un honor tener a Brown como la primera Madrina oriunda de Bahamas.
La ceremonia, realizada en el área de la piscina principal, contó con otro “invitado de lujo”. Un hermosísimo atardecer que sirvió de marco perfecto para la tarde, en la que Brown mostró su chispa, energía y agradecimiento por haber sido escogida como Madrina. “Mis experiencias me ayudaron a reinventarme y transformaron mi vida, y estoy comprometida con mostrar a otros, que pueden hacer lo mismo.
Mientras que Fain indicó que este estreno del Odyssey, un barco de avanzada y único, muestra una vez más lo que se puede lograr cuando se juntan la imaginación y la determinación.
“Nombro este barco como Odyssey of the Seas. Que Dios bendiga a esta nave y a todos los que viajarán en ella”, dijo Brown al accionar el mecanismo que rompió la botella de champán sobre el casco de la nave, como dicta la tradición.
Terminada la ceremonia, que contó como acostumbrado con mensajes religiosos para bendecir al barco y sus pasajeros, y ya con el Odyssey oficialmente listo para navegar (aunque había viajado antes, esto marca su inicio oficial), agentes de viajes, invitados y miembros de la prensa, navegamos en el Odyssey, en un crucero de dos noches hacia “Perfect Day at CocoCay”, el destino privado de Royal Caribbean en Las Bahamas.
