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Foto Matt Stroshane, Disney Cruise Line.
Foto Matt Stroshane, Disney Cruise Line.

El Disney Magic llegó hoy a Geiranger, Noruega por primera vez, como parte de sus viajes temáticos inspirados en la película Frozen.

Con esto el remodelado barco de Disney Cruise Line da inicio a las travesías veraniegas por Europa. Su ruta lo llevará por varios fiordos de la región donde se enmarca el Reino de Arendelle de la famosa película cuyas protagonistas, Anna y Elsa, también se presentarán a bordo.

Foto Matt Stroshane, Disney Cruise Line.
Foto Matt Stroshane, Disney Cruise Line.

Disney Cruise volverá a la región también en el 2016. Noruega es uno de los destinos europeos favoritos en verano y muchos barcos combinan paradas allí con otros países de ese continente. Sin embargo, muchos itinerarios visitan solamente puertos de ese país, una ruta hermosísima y muy popular.

Edificios en Oslo, capital de Noruega. Foto: Gregorio Mayi
Edificios en Oslo, capital de Noruega. Foto: Gregorio Mayi

Oslo, la capital Noruega es uno de los puertos de cruceros más interesantes. Tiene gran historia pero si te gusta lo moderno, tampoco te defraudará. Ha experimentado una enorme evolución y cuando la visites te sorprenderá la cantidad de construcciones y remodelaciones que verás en sus calles.

Oslo, ciudad moderna. Foto: Gregorio Mayi
Oslo, ciudad moderna. Foto: Gregorio Mayi

Oslo se destaca en Europa por su modernismo y su mezcla de estructuras sofisticadas y tecnológicas con edificios culturales, símbolo de su pasado. A esta vibrante capital puedes llegar por tren, avión o en cruceros. En mi caso la visité como punto final de mi viaje con Hurtigruten por los fiordos noruegos, y llegué en avión desde Kirkenes.

Terminal del tren en Oslo. Foto: Gregorio Mayi
Terminal del tren en Oslo. Foto: Gregorio Mayi
Tren en la terminal de Oslo. Foto: Gregorio Mayi
Tren en la terminal de Oslo. Foto: Gregorio Mayi

Oslo es una de las capitales europeas más antiguas y se dice que es de la Era Vikinga. El asentamiento vikingo se encontraba en la zona de Bjorvika, donde se encuentra hoy la Casa de la Opera de Oslo. No está claro de donde proviene su nombre, pero se cree que “Os” significa colina o dios vikingo y “lo” llanura de los dioses.

Museos

Hay muchísimos por la ciudad y son como siempre, el elemento perfecto para conocer parte de su historia.

Casa de la Ópera, interior. Foto: Gregorio Mayi
Casa de la Ópera, interior. Foto: Gregorio Mayi
Casa de la Ópera, exterior. Foto: Gregorio Mayi
Casa de la Ópera, exterior. Foto: Gregorio Mayi

Para destacar están el Museo del Esquí y del Trampolín, al que puedes llegar en la línea 1 del metro hasta la estación de Holmenkollen. Abre por temporadas.

Otros museos importantes son el Museo de los Barcos Vikingos, Museo Kon-Tiki, Museo Fram, el Museo Ibsen y el Centro Nóbel de la Paz, donde hay un jardín y toda la información de ese importante premio mundial que se entrega en Oslo.

Atracciones

Esquiar es parte de los grandes atractivos que ofrece esta ciudad, y puedes hacerlo muy cerca. Desde el centro puedes llegar a los centros de ski en transporte público, incluyendo la estación invernal de Tryvann, a solo 20 minutos del centro de la ciudad. El esquí es una de las actividades más populares entre turistas y muchos hoteles te ofrecen un paquete de estadía y este deporte.

Foto: Gregorio Mayi
Foto: Gregorio Mayi

Si vas en Navidad, (que no es temporada de cruceros), no te pierdas el mercado navideño de Folkemuseum, uno muy popular entre turistas y locales.

Si vas en familia

El parque Tusenfryd, es el de atracciones más grande en Noruega y está a 20 minutos de Oslo. También hay un parque de verano (Oslo Summerpark), y en los bosques de la ciudad hay pistas para bicicletas con diferentes niveles de dificultad.

Turismo gay

Conocida por ser una ciudad hospitalaria para la población gay tiene desde el 2008 una ley para los matrimonios entre parejas del mismo sexo. Aunque la vida nocturna no se define como segmentada para los turistas gay o lesbianas, la Guía Oficial de Oslo destaca los bares puramente gay, como el London y el Elsker. En Oslo se realizará el día de Orgullo Gay de Europa en el 2014.

Moneda

Se usa la corona noruega, (Kroner). En el 2014, 100 Kroners equivalen a 16.50 dolares, es decir, un dólar equivale a 6.06 kroners, además un euro equivale a 8.09 kroners. Puedes usar el euro, y en algunas tiendas aceptan dólares.

Cómo transportarte

Foto: Gregorio Mayi
Foto: Gregorio Mayi

Si no quieres gastar un dineral, cuidado con los taxis. Además de que los trenes y autobuses son muy fáciles de usar, los taxis son muy costosos. Los trenes y autobuses que te llevan a las atracciones también te transportan desde y hacia el aeropuerto. También tiene un eficiente sistema de autobuses turísticos “Hop On-Hop Off” que ofrecen por uno o varios días transporte a las principales atracciones y además puedes usar botes en vez de autobuses con el mismo sistema de subir cuantas veces quieras.

Si vas en crucero

Hurtigruten Foto: Gregorio Mayi
Hurtigruten en Noruega. Foto: Gregorio Mayi

Los cruceros por el Mar Báltico son los que visitan Oslo, cuyo puerto está en el mismo centro de la ciudad y desde allí es fácil desplazarte. Es considerado puerto de embarque o desembarque. Desde allí puedes caminar a varias de las atracciones.

Toma en cuenta

Si quieres ahorrar evalúa la OsloPass, una tarjeta de descuento que te incluye las entradas a las atracciones más importantes y transporte.

Aeropuerto de Oslo. Foto: Gregorio Mayi
Aeropuerto de Oslo. Foto: Gregorio Mayi

La ciudad es una cara, o como dicen algunos “carísima”. Por eso ajusta tu presupuesto, determina las atracciones a visitar y busca todos los descuentos posibles. Incluso la comida en lugares que deben ser económicos como en la estación del tren, es costosa.

Casa de la Opera en Oslo. Foto Gregorio Mayi.
Casa de la Opera en Oslo. Foto Gregorio Mayi.

Ya me lo habían dicho: “Cuando vayas a Oslo no te pierdas la visita a La Casa de la Opera”. Esa recomendación de mi amiga pude seguirla al pie de la letra, ya que mi reciente visita a Noruega fue perfecta para conocer la que es uno de sus símbolos arquitectónicos modernos más famosos: La Casa de la Opera, en Oslo, la capital de ese país nórdico. Está ubicada en la zona de Bjørvika, una antigua área industrial que ahora está transformándose en un nuevo centro cultural de la ciudad.
Inaugurada en el 2008, este lugar cultural es toda una atracción turística que ya han visitado millones de personas desde su apertura. Para visitarla no tienes que pagar nada. Su ubicación, frente al fiordo de Noruega, frente a la estación central del tren y a minutos caminando de la terminal de autobuses, la hace muy accesible a los turistas que visitan el centro de Oslo.
Casa de la Opera Oslo. Foto Gregorio Mayi.
Casa de la Opera Oslo. Foto Gregorio Mayi.

En mi caso estando hospedada en el Thon Opera Hotel, solo tuve que cruzar el puente peatonal temporero para llegar allí (hay mucha construcción en la zona). Si llegas en crucero, el puerto está muy cerca. Yo llegué en avión desde Kirkenes, pueblito que hace frontera con Rusia, como parte final de mi viaje de uno de los barcos de Hurtigruten por la costa noruega.
Casa de la Opera Oslo. Foto Gregorio Mayi.
Casa de la Opera Oslo. Foto Gregorio Mayi.

El edificio construido por la firma de arquitectos noruegos de Snøhetta, es puro mármol y cristal. Impresionante resulta subir sus escalinatas de mármol, llegar hasta su enorme terraza al aire libre y ver desde allí la ciudad, donde lo mismo encontrarás edificios modernos altísimos que estructuras históricas que hay que conocer para entender la transformación que está viviendo la capital noruega en estos días. Las construcciones donde quiera, son otro indicio de la solidez de la economía, de una de las ciudades más caras de Europa, pero también donde se gana bastante bien.
Casa de la Opera Oslo. Foto Gregorio Mayi.
Por sus características no extraña que la Casa de la Opera sea un lugar de encuentro habitual de turistas. Cuando la visité en su plazoleta habían grandes fotografías de obras presentadas allí, otra muestra más de que por su escenario ha desfilado la crema y nata del arte mundial. Claro, subí las escalinatas, porque si no lo haces, es como no haber ido. Allí te advierten que hagas el esfuerzo caminando porque las bicicletas, patines o patinetas no están permitidos. ¡Valió la pena, y además no cansa demasiado!
Casa de la Opera Oslo. Foto Gregorio Mayi.
Casa de la Opera Oslo. Foto Gregorio Mayi.

Ya bajando, pude entrar y ver su vestíbulo, donde se destaca el roble del Báltico. Allí mismo hay uno de los varios restaurantes que tiene el edificio, y áreas para sentarse. Si quieres una visita en profundidad, para conocer todos sus detalles, hay tours guiados en inglés los fines de semana. Requiere reservar.
Entre otros detalles el lugar tiene acústica excelente, varios escenarios y salas, y en una de ellas, 1,350 butacas cada una con su pantalla individual para ver subtítulos en ocho idiomas. Aunque el lenguaje del arte es universal, es muy bueno poder entender a plenitud lo que se dice. El edificio tiene paneles solares que suplen la energía necesaria, y una enorme lámpara de araña que pesa ocho toneladas.
Casa de la Opera Oslo. Foto Gregorio Mayi.
Casa de la Opera Oslo. Foto Gregorio Mayi.

Si vas a Oslo, esta es una de las atracciones que no te puedes perder. Allí además es imperdible la fotografía sentados en las escalinatas, o teniendo como fondo la ciudad.
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